Las escasas lluvias ilusionan, pero no alcanzan.
Las escasas lluvias ilusionan, pero no alcanzan.
EXTENSA SEQUÍA

Afirman que el plazo de recuperación de caudal de la Laguna de Gómez “es incierto”

Lo aseguró el ingeniero Alejandro Signorelli, jefe del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Junín. Además señaló que la situación no ha cambiado ya que las lluvias no son suficientes, y hasta que no se llene la cuenca de los canales que abastecen a la laguna, no llegará el agua.

Las precipitaciones que cayeron sobre la región en las últimas semanas dieron un respiro a la intensa sequía que atraviesa la zona, pero lejos están de cooperar para lograr una recuperación de la Laguna de Gómez.

Consultado por Democracia, el ingeniero Alejandro Signorelli, jefe del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Junín, señaló que la situación no ha cambiado ya que las lluvias no son suficientes, y hasta que no se llene la cuenca de los canales que abastecen a la laguna, no llegará el agua. Recién hacia el año que viene podría verse algún cambio, de darse suficientes lluvias de verano.

El plazo de recuperación es incierto

Signorelli remarcó que “el panorama sigue igual que antes. Si bien hubo precipitaciones, estas no alcanzan para abastecer normalmente a la Laguna”. 

A su vez, como refirió en otras entrevistas, “la laguna forma parte de lo que es la cuenca superior del Salado, y hasta que no se llene bien la cuenca de los canales que la abastecen, no van a traer agua. Principalmente todo lo que viene de la Mar Chiquita de General Arenales, donde vemos que los canales están prácticamente mínimos o secos en algunos lugares. La situación sigue igual”.

De su visita reciente a La Picasa, el pronóstico no fue alentador: “La verdad es que está con mucha falta de agua, ni siquiera toca la ruta el agua. Es más, es una situación sobre la Ruta 7 muy parecida a la de Gómez. Vas transitando y, donde antes había agua, ahora ves matorrales y pastos”. 

Y remarcó que "hasta que eso no desborde, no va a tirar agua al canal de Las Horquetas para llenar la de Mar Chiquita. Y recién cuando se llene la de la Mar Chiquita, va a llenar la de Gómez. Esa es siempre la gran afluente de agua, en cantidad, que nos llena las lagunas”.

Según Signorelli, “las lluvias locales suman, pero son pocos milímetros que enseguida se evaporan. Tiene que haber lluvias locales y lluvia en toda la cuenca para que drene agua”.

Sobre los plazos para que la laguna recupere su caudal, fue tajante: “Es incierto el plazo de recuperación. Tuvimos tres o cuatro años muy secos que generaron un impacto y que no sabemos realmente desde lo económico, desde la biodiversidad; son muchas cosas que impactan negativamente”.

Luego, amplió: "La recomposición es incierta y estamos entrando en etapa de otoño e invierno -que va a llover poco y nada-, con perspectivas hacia mitad de fin de año de tener La Niña otra vez. Así que el panorama no es bueno”. 

“En este año se estima que no va a haber cambios. Hasta el año que viene, hasta que tengamos una buena lluvia de primavera verano, no lo vamos a ver”, cerró.

Extensa sequía 

La sequía extrema que viene afectando a Junín y la región transformó a la Laguna de Gómez en un gran desierto. 

Es preciso recordar que entre septiembre y octubre de 2023 se había registrado una pronunciada bajante, a tal punto que en algunos sectores de Gómez ya se podía cruzar caminando de costa a costa.

Luego, con las últimas lluvias registradas entre fines de octubre de 2023 y enero de este año, coincidentemente con la llegada de El Niño, la Laguna había recuperado parte del caudal de agua y se abría una esperanza en que recobre su caudal.

Pero, tras una segunda quincena de enero con calor y pocas precipitaciones registradas, el panorama volvió a ser desolador, agravando la ya complicada situación hídrica.

Además, cabe destacar que durante el verano se produce mayor evaporación de agua debido a las altas temperaturas.

“Las lagunas de Junín están sufriendo la mayor sequía de los últimos 60 o 70 años que se tenga memoria. Son dos años consecutivos y tres de La Niña, que es un periodo seco -y en este caso fue extremadamente seco-, donde no se pasó la mitad de la media anual y han llovido por año 400-500 milímetros, teniendo en cuenta que llueve de 900 a 1100”, afirmó en una nota reciente a este medio el concejal Marcelo Balestrasse. 

“Si se suman los tres últimos veranos, tenemos una faltante hídrica por la época estival de 1.200 metros cúbicos. Con lo cual realmente al sistema lo ha afectado, tal como se ve, una sequía de las más grandes que se recuerda”, indicó.

Y rememoró que “del 47 al 51 hubo sequía, en el 63 hubo sequía, en el 85, 86 hubo sequía, en el 2009 hubo sequía, y ahora actualmente en los últimos dos años hay sequía, pero ninguna fue tan grave como la de ahora, porque siempre en Gómez se mantuvo el agua en el medio y ahora directamente no está”.

Luminarias en el espigón

Desde hace tiempo continúan los trabajos en el espigón de la Laguna de Gómez, y ya se encuentra colocado el alumbrado.

La obra provincial está prácticamente terminada, ya que solo falta la baranda y la obra de arte. Cabe destacar que se realizó en dos etapas.

Su concreción junto a la recuperación del caudal de la laguna serán claves para continuar apostando al turismo, una actividad económica elemental para la ciudad.

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